La necesidad de paz y prosperidad contra la incertidumbre
En #Palencia, ¡es Navidad! ✨🎄— Somos Palencia (@SomosPalencia) 24 de diciembre de 2017
Disfruta de la ciudad acompañado de la iluminación navideña, la ruta de los Belenes, una gran oferta cultural, talleres para los más peques y trineos 🛷
¡¡FELIZ NAVIDAD!! ☺️ pic.twitter.com/bMs0k5N3SR
No he tenido aún la oportunidad de ver, in situ, lo bonita que está Palencia estos días. Según me llegan fotos y vídeos a través de las redes sociales y el teléfono móvil, pienso que a nuestra querida ciudad le sientan cada vez mejor estas fechas, y me vienen al recuerdo otros momentos de nostalgia dulce, pese a no tener años atrás toboganes de hielo, pistas de patinaje o árboles tan relucientes.
La vistosísima, luminosa y agradable postal navideña contrasta con el regusto amargo de una realidad que nos salpica de lleno, y no precisamente de agua. Si bien mantengo que podemos mantenernos al margen del problema catalán, no podemos no escuchar el lamento de nuestros pantanos, como tampoco podemos desoír a nuestros mayores... Incluso ellos temen por sus pagas mensuales una vez vacías las arcas de las pensiones.
A nosotros, los jóvenes, ya se nos ha invitado a abrirnos planes de pensiones privados, una vez se nos ha precarizado y se nos incluyó en una 'movilidad exterior' lejana a nuestros lugares de origen.
Entretanto, uno toma un ejemplar de Diario Palentino, y desayuna este martes post navideño con un titular que no invita, precisamente, al opimismo: en los próximos diez años, seremos 12.000 palentinos menos. La demacrada provincia de Palencia. La imposibilidad de un relevo generacional suficiente.
Mal asunto que nuestros mayores, en un tiempo, no estén; y nuestros jóvenes, con tantísimos revueltos cerebrales, no acabemos de dar a nuestras vidas la estabilidad que buscamos.
Vamos cerrando un año, que al final, se nos ha complicado. Me asomo a 2018 con cierta incertidumbre y con los mismos deseos de todos los años. La paz, pasando por el respeto, es necesaria. Y la prosperidad, más que nunca. Si no sentimos que prosperamos, nos morimos en vida. Y el ambiente no es el más cómodo.
¡Feliz 2018 a todos los palentinos de fe y de corazón!
0 comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio