Pues fue un grande... por ahora irrepetible

Marcos de Celis. El toreo no es lo mío, pero siempre he oído hablar muy bien de él. Dicen los entendidos que éste fue uno de los grandes. Además, palentino. En Palencia gusta todo, hasta los toros. En los últimos años no están saliendo unas corridas, la verdad, realmente buenas en San Antolín, pero gusta ir a la plaza y ver a un buen puñado de toreros de Primera en directo, en carne y hueso. Y la gente se lo pasa bien, eso si no nos llueve.

El caso es que se cumple el cincuenta aniversario desde su alternativa, el día en que comenzó a consagrarse como uno de los grandes del panorama nacional. Numerosos portales especializados se hacen eco del homenaje que Palencia le ofrece: la exposición fotográfica de su vida, la corrida-homenaje, la presentación de su biografía... Todo en un marco, el de la Feria Chica, perfecto para recordar que Palencia vio nacer a hombres que fueron buenos en lo suyo y que hoy siguen siendo recordados con cariño a la par que admirados. Su rostro es inconfundible y tiene una planta muy particular, ese pelo medianamente largo canoso, su gorrilla, su buen vestir y su mirada, la misma que utilizó durante años para dar uno y mil estoques a los toros que se plantaron en su camino por ruedos y arenales.

Y también es verdad que, desde entonces, aquí estamos esperando un nuevo nombre. El Millonario (que me disculpe, pero no sé cómo pudo llegar a ser pregonero) ya no cuaja, no es grande, pero ahí sigue. Y ahora, la esperanza de todos: Carlos Doyague, que dará el salto al toreo de élite el día 2 de septiembre, el día más glorioso de Palencia. Los que le han visto y saben más que el que aquí escribe dicen que no, que no nos engañemos, que apunta maneras, pero es que, los que escriben y hablan, dicen que le quieren bien... Todo está por ver, no tardando.