Palencia Entre Líneas

Cuatro apuntes sobre un sentimiento y una forma de vida: la nuestra. Palencia existe, se ve, se toca y se disfruta. Es un modo de vida.

23 marzo 2016

Feliz Semana Santa

IMAGEN: Semana Santa Palencia
Nunca me lo habían deseado, hasta este año. Si bien, me lo ha dicho una persona que, sin trabajar en el ámbito de la Educación, tiene tantas vacaciones como un maestro, y cuya hoja de ruta pasa por visitar varias ciudades, no precisamente para ir de museos.
El caso es que, luego, se lo oí a otra persona, como quien desea Feliz Navidad o Feliz Año Nuevo... ¡Y hasta un Felices Fiestas he llegado a escuchar!
Cierto es que desde hace mucho tiempo, la Semana Santa es uno de los períodos de más tráfico del año, es una semana en la que la celebración religiosa no deja de ser una excusa para todo lo demás: turismo, gastronomía, hacer caja y el 'postureo' de las procesiones.
Que cada vez trabaje más gente en Semana Santa no deja de ser una evidencia del 'hacer caja'. Partiendo de esa premisa, que la Semana Santa palentina fuese proclamada de Interés Turístico Internacional es una excelente excusa para todo lo enunciado.
Lejos de los cantares y las devociones extremas por determinados Cristos, especialmente, en las procesiones del sur de España, Palencia mantiene la sobriedad propia del interior de la península y la solemnidad castellana.
Pero el 'postureo' existe: ¿Quién no conoce a quien no pone un pie en una misa en todo el año, se caga en lo más alto trescientas veces al mes y, sin embargo, se desvive por su Cofradía, que su dinero le vale?
Con esa pérdida de fe y del sentido de lo estrictamente religioso, no debería extrañarme tanto que me hayan deseado una Feliz Semana Santa. ¿Qué será lo próximo? ¿Regalos? Espero que no.
Cuando, reciemente, trabajé un Viernes Santo, en la radio, en Cope, para la página web, durante un Atlético de Madrid - Elche pensé que algo había cambiado.
Así que, quien se vaya de turismo, que lo disfrute. Quien se quede en casa, que descanse. Quien decida vivir intensamente su fe, que lo sienta. Y que, además del deseo de felicidad, nunca renunciemos del todo al sentido común.

21 marzo 2016

El Chiguito Arena

IMAGEN: Diario Palentino
Entiendo que la decisión no es fácil, pero alea iacta est. Vamos a ir probando y vemos si el Pabellón Municipal de los Deportes de Palencia puede ampliarse. Vamos a ir viendo si hay hueco para más graderío. Y si lo hay, a darle estopa a una obra que va a haber que verla. Y, si no, ya veremos. Y hasta parece que está todo planificado.
Que nuestro principal recinto cubierto se nos quede pequeño es un bendito problema, sin duda. La ampliación de su aforo sería un paso adelante, que no definitivo, para lograr el ascenso administrativo de Quesos Cerrato a la Liga ACB, cuyo futuro (el de la Liga) sigue siendo incierto dentro de la certidumbre de ir sacando adelante un torneo liguero cada año.
Objetivo: 'Arena', nombre tan de moda para definir todo lo que sea grande, cubierto y acoja espectáculos. Hay tres opciones: construir un pabellón nuevo, que es la mejor, pero es muy cara; adaptar la Plaza de Toros, que también es caro, con sus pros y sus contras; y, la otra, ver si el Pabellón se puede ampliar, que no es mala idea pero es la que menos me convence, dadas las dimensiones y ubicación del actual recinto.
Hubo muchísimas expectativas en cuanto a la última reforma del recinto, que acabó siendo poco más que chapa y pintura, lo que viene a ser un lavado de cara. Ahora las expectativas están más altas, si cabe, para reordenar el espacio interno, salvo que se tire abajo alguna de las paredes y se haga una grada en condiciones para alguno de los fondos... Toca estudiar, comprobar, reformar... ¿demoler?, ¿reconstruir? ¿reestudiar? ¿improvisar?... La incertidumbre que rodea a unas obras ocurre hasta en el cambio de tuberías de la más modesta de todas las casas.
Y, como en toda obra, no hay plazos que se cumplan. Y, menos, cuando hay prisas. Obras a las que habría que recurrir también en el caso de optar por ampliar la Plaza de Toros de Palencia, de cuyo sobrenombre no quiero acordarme, y que acabarían por hacer una especie de Vista Alegre, en Madrid, donde siempre se me hizo ver difícil el baloncesto, aunque no tanto como ver fútbol con pista de atletismo en medio. Eso sí, el aforo ya lo tenemos.
En cualquier caso, hagamos lo que hagamos, hagámoslo bien. De la buena fe no dudo nunca. Nuestras instalaciones son nuestra carta de presentación de cara a jugadores, entrenadores, aficionados, organizaciones, periodistas, gente guapa que llega a los palcos, etc, etc, etc, y cuyo recuerdo de la ciudad también pasa por su estancia en el Pabellón, por muy breve que sea.
Pabellón que será reconstruído, ampliado, renovado o lo que sea, al estilo Palencia: se hace, guste o no guste, salga o no salga. Y si hay que cambiar 300 veces el adoquinado de la Calle Mayor, se vuelve a hacer. Lo que parece claro es que el 'Chiguito Arena' (Pabellón moderno palentino) está en camino.