Referencia Paulino
Parece, simplemente, cuestión de carácter o de hacerse notar en el campo. El adjetivo en cuestión suele estar reservado para ese jugador que, además de hacerlo bien, tiene un plus que gusta a la gente. Algo que le hace único, por ende imprescindible y, al final de cuentas, acaba por ser la referencia de todo un equipo, de todo un club y de toda una afición.
Este hombre en cuestión es un tal Paulino. Un excelente futbolista y, dicen los que le conocen, genial persona. Su llegada al Palencia, en pleno descenso, fue una alegría. Esta temporada, a pesar de tener más cerca los cuarenta que los treinta, mantiene vivo un espíritu de chaval. Un veterano con un portentoso físico. Un guerrero, un líder, un hombre feliz jugando al fútbol y practicando deporte. También un provocador nato... Y eso gusta. Disgusta cuando te lo hace a ti, cuando llega vistiendo los colores de la Cultural y hace que La Balastera pite su nombre. Pero cuando se abre el telón y salta al césped con la elástica morada, la grada entera siente parte de su orgullo manchego.
Serrano será por las temporadas que lleva; Pelayo o Canario por hombres de la casa; Agostinho o Benjamín por nombre y cierto prestigio... Pero algo tiene Paulino Martínez Soria, nunca pretendido por un grande, para ser el ídolo de muchos "moraos". Quizás desde que "El Gran Capitán" abandonara el barco (hoy llevando con mucha profesionalidad el timón del Otero), se ha echado de menos un hombre de ese corte.
Paulino juega y hace partícipe a la grada: 8 goles, de momento... Ahí es nada. La referencia en punta de lanza. Es fácil presagiar que a La Balastera le quedan muchas tardes por corear su nueve.
Este hombre en cuestión es un tal Paulino. Un excelente futbolista y, dicen los que le conocen, genial persona. Su llegada al Palencia, en pleno descenso, fue una alegría. Esta temporada, a pesar de tener más cerca los cuarenta que los treinta, mantiene vivo un espíritu de chaval. Un veterano con un portentoso físico. Un guerrero, un líder, un hombre feliz jugando al fútbol y practicando deporte. También un provocador nato... Y eso gusta. Disgusta cuando te lo hace a ti, cuando llega vistiendo los colores de la Cultural y hace que La Balastera pite su nombre. Pero cuando se abre el telón y salta al césped con la elástica morada, la grada entera siente parte de su orgullo manchego.
Serrano será por las temporadas que lleva; Pelayo o Canario por hombres de la casa; Agostinho o Benjamín por nombre y cierto prestigio... Pero algo tiene Paulino Martínez Soria, nunca pretendido por un grande, para ser el ídolo de muchos "moraos". Quizás desde que "El Gran Capitán" abandonara el barco (hoy llevando con mucha profesionalidad el timón del Otero), se ha echado de menos un hombre de ese corte.
Paulino juega y hace partícipe a la grada: 8 goles, de momento... Ahí es nada. La referencia en punta de lanza. Es fácil presagiar que a La Balastera le quedan muchas tardes por corear su nueve.